jueves, 24 de febrero de 2011

Ni siquiera con la educación



Voy a dedicar unos minutos de mi valioso tiempo a un artículo que he leído esta mañana en "L'informatiu.com y que lleva por título lo siguiente:
"Barberà concedeix a la catòlica uns terrenys que eren per a escoles públiques".
Podéis leer el artículo completo pinchando en el siguiente enlace:

En el artículo nos enteramos de que el Ayuntamiento de Valencia ha decidido recalificar unos terrenos que estaban destinados a la construcción de escuelas públicas desde el 2009. Pero desde entonces han pasado 2 años y parece ser que se lo han pensado mejor, y es que "lo público" no da dinero y la iglesia está forrada de pasta, aunque sigan pasando el cepillo todas las tardes. Y también hay que comprender que mantener el tren de vida del ayuntamiento de Valencia debe costar lo suyo, y ahora que "el bigotes" ya no contribuye a sufragar los gastos... de algún sitio hay que sacar el dinerillo para "que la mujer de rojo bote en fallas".

Y mientras, miles de alumnos estudian en barracones, en precarias condiciones.



¿Es que hasta con la educación se tiene que hacer negocio?

Este no es el camino que debemos (o deben) seguir para luchar contra el fracaso escolar o mejorar nuestros resultados (informe PISA). Quizá deberían dejar de echarse las culpas unos a otros y echar una ojeada a los países que nos llevan la delantera (Finlandia, Canadá, Australia...), donde por ejemplo la ratio (número de alumnos por profesor) es considerablemente inferior a los 25 que tenemos aquí y la inversión en educación es mucho mayor.

Pero con gobiernos que apuestan más por lo privado que por lo público, la situación se complica más. No obstante soy optimista, no porque confíe en los políticos, sino porque confío en la educación, en la educación pública, pues está formada por auténticos profesionales que lo dan todo día a día y lo seguirán haciendo hasta el final de sus carreras.

You may say I'm a dreamer, but a I'm not the only one. I hope someday you'll join us, and the world will be as one. (John Lennon)